Uno de los acontecimientos con mayor repercusión este año en lo deportivo estaba siendo la posibilidad de que Morales, una de las grandes leyendas del Levante, acabara desvinculando su camino del conjunto valenciano. El viernes 5 de febrero el culebrón llegó a su fin, Morales firmó su nuevo contrato con el Levante para las próximas campañas tras el paso histórico del equipo a unas semifinales de la Copa del Rey.
Primero toca analizar la historia del acuerdo. A inicios de la presente temporada el club envió al jugador la primera oferta. Según comentó el presidente del Levante, Quico Catalán, la oferta consistía en una duración de por vida hasta que el jugador decidiera retirarse. Todo apuntaba a una bajada del sueldo del jugador, y es que a pesar de su gran campaña el capitán del equipo parecía haber comenzado su cuesta abajo cómo jugador tras una pasada temporada mala donde solo marcó 4 goles y acabó siendo suplente en la segunda vuelta.
Morales estaba descontento, muchos fueron los rumores, pero todos apuntaban la misma dirección: la oferta era insultante, para nada a la altura de lo que el jugador pensaba que había dado por el equipo. Muchas voces apuntan a que el propio jugador pidió salir gratis en el mercado invernal. Uno de los desencadenantes del malestar fueron los grandes contratos que firmó la dirección deportiva con otros jugadores, cobrando más que Morales con un rendimiento deportivo mucho menor. El ejemplo más claro está en el salario de Sergio León de más de 2 millones anuales con una función progresiva, cada año cobraría un poco más. El contrato de Morales era de 1,7 millones.
Otro foco estaba en lo deportivo. El Levante no quería dar 3 años más aun jugador de 34 años. Sin embargo Morales pensaba que todavía podía dar guerra mucho tiempo, incluso se habla de que el propio jugador reclamaba ser importante por contrato, obligar a Paco a contar con Morales como titular durante toda su carrera futbolística. El jugador pensó en ir a otro club donde le pudieran asegurar la titularidad por siempre.
Las negociaciones estaban paradas, el acuerdo fue en un visto y no visto. Tras la clasificación a las semifinales de la Copa del Rey salieron imágenes de Morales y Quico Catalán llorando tras el pitido final. Fue un presagio de lo que pasaría en las siguientes horas. Tras la fiesta Quico tomó la iniciativa, encargándose personalmente de la renovación de “El comandante”. A las pocas horas club y jugador signaban su vinculación hasta 2023 más un año opcional según objetivos, por un sueldo de más de 2 millones de euros. También existe una cláusula de recisión de 30 millones.
Lo que parecían 2 corazones rotos acaba siendo un guion perfecto para una película de Antena 3. Morales seguirá capitaneando el Levante mínimo por 2 años más ¿Para celebrarlo? Otros 2 goles ante el Granada, un punto más cerca de la permanencia y unas históricas semifinales de Copa ante el Athletic Club. A sus 34 años lleva 10 goles actualmente, a solo 2 de su mejor campaña goleadora en la primera división con el Levante. Una semana para recordar en la memoria del pequeño Levante.
