El Celta arrancaba una nueva temporada con la misma ilusión que en años anteriores pero con las mismas dudas que llevaba generando el equipo varias temporadas. Se esperaba tener una campaña tranquila ya que el año pasado el equipo se complicó la vida y mucho después de un segundo tramo de temporada nefasto pero parece que esto no será así. Hubo mucho movimiento en el equipo con varias bajas y altas que cambian la idea del equipo. Al banquillo llegó un entrenador con amplia experiencia como Rafa Benítez pero que terminó saliendo por los malos resultados del equipo.

Las principales altas de esta temporada en el arranque de mercado fueron la vuelta de los jugadores cedidos por el conjunto vigués, aunque muchos volvieron a salir.  Manu Sánchez, incluido en la operación salida de Galán al Atlético Madrid y la adquisición el propiedad de Carles Pérez y Unai Núñez. A mediados de julio el equipo realizó dos movimientos muy interesantes gracias a la llegada a coste cero de Jonathan Bamba y la llegada de Carlos Dotor del Real Madrid por tres millones de euros. En la primera semana de agosto llegó al equipo, después de un pago de cinco millones de euros, el defensor Carl Starfelt. Las últimas incorporaciones del equipo fueron Ristic, Guaita y Douvikas que llegaron en los últimos días de mercado.

Las bajas fueron varias en verano y destacaron las de Toro Fernández, Rubén Blanco y Pineda que dejaron dinero en las arcas gallegas. Otros jugadores que abandonaron el equipo a coste cero fueron Denis Suárez, Santi Mina o el ex capitán Hugo Mallo. Lautaro de León salió cedido al igual que José Fontán. Finalmente, la marcha de Gabriel Veiga fue dura pero dejó mucho dinero en el club. En los últimos días del mercado también salieron Miguel Baeza, Sergio Carreira y Gonçalo Paciencia.

Después de un primer tramo de temporada nefasto el equipo se ha complicado de nuevo la vida en esta temporada y parece que habrá que luchar por evitar el descenso hasta final de temporada. Para este mercado invernal se esperaban varios movimientos en el club celeste para intentar reforzar la plantilla. La primera alta fue la de Jailson, centrocampista que ya coincidió con Benítez hace varias temporadas y parece una petición por su parte. En los siguientes días llegó Manquillo al equipo, con la carta de libertad bajo el brazo. Finalmente, llegó traspasado al equipo el delantero Tadeo Allende procedente del fútbol argentino. En el apartado de salidas la primera que se produjo en el mercado invernal fue la de Marchesín, que finalmente se fue al fútbol brasileño en busca de minutos. También el equipo cambió la cesión de Lautaro de León en busca de que tenga mayor progresión en el Mirandés de la que ha tenido en el Cartagena.

Durante la segunda parte de la temporada se produjo la destitución de Benítez y la llegada de Giráldez con el objetivo de escapar de la zona peligrosa de la tabla y no sufrir en las últimas jornadas.